Me inicié en el masaje facial cuando trabajaba en la TV, ya que veía muy estresados a los presentadores, sobre todos los de informativos. Todo se refleja en la cara, de ahí el dicho que la cara es el reflejo del alma.

El masaje facial es muy efectivo para devolverle al cuerpo la vitalidad perdida. Se estimulan los puntos reflejos del rostro y el cráneo, siguiendo los paralelos de energía, los cuales están conectados con las diferentes partes del cuerpo. Se crea de esa forma una gran relajación.

La reflexología facial puede aliviar las migrañas, neuralgias, cefaleas, problemas posturales, tensión en cervicales, mareos, meniére, stress, depresión, nerviosismo, hiperactividad, etc.

Reafirma y tonifica los músculos del rostro, activa la circulación sanguínea, incrementa las defensas del organismo, sintoniza el metabolismo corporal, libera endorfinas y mejora el estado emocional.
Las primeras prácticas que se conocen sobre la reflexología facial datan del año 2500 A.C. en el antiguo Egipto.

Los incas también la practicaron durante generaciones, como terapia de salud y prevención.

Los indios Cherokee de Carolina del Norte la usaban para mantener el equilibrio orgánico.

La reflexología facial ayuda principalmente a relajar los músculos faciales y por lo tanto aportando belleza al rostro de forma casi instantánea.